Ganador por tres años consecutivos en el Academy of Chocolate Awards de Londres y si bien Chile no es productor de cacao está muy bien representado con la variedad que está desarrollando el estadounidense Mark Garrits, quien en un local llamado Óbolo, del Barrio Italia de Santiago, fabrica y vende una variedad que rescata la identidad de nuestro país.
Y es precisamente en la busca de este reconocimiento nacional que el desierto de Atacama y Toconao tienen una importante participación, pues gracias a ProChile trabaja con pequeños productores y en el caso local con Patricia Pérez, una recolectora atacameña que le provee de rica rica y muña muña.
“Estamos felices de que nuestros sabores puedan ser degustados en distintas partes del mundo. Es un honor trabajar con un producto que rescata y difunde justamente eso, nuestra identidad”, comentó la comunera.
Mientras que Garrits afirmó a un Las Últimas Noticias que quiere “convertir Óbolo en un chocolate con identidad chilena. No somos un país productor de cacao, pero eso no significa que no podamos ser un productor de calidad mundial y con identidad”.
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