Hasta el Instituto de Salud Pública, en Santiago, serán enviados los exámenes que fueron tomados a los diez alumnos que se vieron afectados en la escuela República de Bolivia. El motivo de llegar a esta instancia es porque no existe claridad en qué habría gatillado los síntomas y que a algunos de los alumnos los dejara hospitalizados.
En una entrevista en radio Carillón, la seremi de Salud, Rossana Díaz, comentó que esta decisión se basa en la búsqueda de saber “qué es lo que realmente pasó, para asegurarnos que no se nos pasa nada por alto”, porque aseguró que tras fiscalizar el establecimiento, su casino y diversas instalaciones, además del alrededor, no encontraron un foco que podría haberles afectado.
“Estamos investigando, a pesar que los niños están bien, porque no nos vamos a quedar tranquilos y vamos a seguir investigando todo lo que se pueda. Pudo haber sido algo ocasional, algo que vendieron fuera. Pero no nos quedaremos tranquilos y estamos en contacto con el seremi de Justicia y con el servicio médico legal” agregó la autoridad regional.
En cuanto a la inspección que deben ser sometidos este tipo de establecimientos, la seremi comentó que “estamos normalmente fiscalizándolos y en Calama las escuelas están bastante bien. Este es un caso agudo, que es cuando aparece de la nada, cuando no se sospecha. No es como una enfermedad crónica, como la hipertensión en la que se va preparando para, esto es como un resfrío, que llegó y pasó, pero como no tenemos claro el por qué no podemos dar una respuesta completa”.
Una vez que el ISP entregue una respuesta se podrá dilucidar lo que ocurrió con los siete niños de la semana pasada y los tres de ayer, todos pertenecientes a un octavo básico del establecimiento.