Fue hace algunos días que sufrieron el robo de su kit de PCR en la Escuela “Claudio Arrau”, aún así y como dice el dicho, continúan “poniendo el pecho a las balas” y trabajan con todas las ganas del mundo en el proceso de notificación de pacientes positivos por Coronavirus.
Esto, más aún cuando han enfrentando un complejo panorama de inicio este año, ya que en enero se registraron alrededor de 7.660 casos positivos mientras cambiaban las reglas del paciente considerado contacto estrecho por aquel en alerta de covid, lo cual ha incrementado la demanda de los test PCR.
Aunque en febrero existió una disminución en los casos, el equipo comunal de covid continúa trabajando en el testeo, monitoreo y las visitas domiciliarias a los pacientes, como es el caso del kinesiólogo, Pablo Monje, el cual forma parte de este equipo desempeñando el rol de monitor covid de los casos positivos. Es decir, contacta a la gente para verificar sus condiciones de salud, les dice los días que deben hacer cuarentena y evalúa si requieren visita domiciliaria. Eso se va coordinando entre clínicos y administrativos que suman 35 personas que trabajan en la Escuela “Claudio Arrau”.
De este modo, Pablo al igual que los demás monitores covid, llama entre 20 a 30 personas al día para preguntarle por su estado de salud. Por lo que aclaró cómo trabajan, recalcando que “actualmente, la fecha de cuarentena para todo paciente positivo son siete días, pero antes del 20 de enero teníamos clasificaciones de 10 días para casos índices y contactos estrechos siete días, y todo dependía del esquema de vacunación. Entonces, hoy todavía nos encontramos con gente que no tiene el esquema de vacunación completo, principalmente extranjeros. Aún así, a todos se les da la información de las medidas preventivas”.
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