Plan de Protección para la Clase Media fue el nombre que le dio el Gobierno a estas cuatro medidas que irían en directo beneficio de las familias que ganan más de $500 mil pesos y que como efecto de la pandemia vieron disminuidos sus ingresos.
Este plan tiene cuatro focos de acción y según comentó el ministro de Desarrollo Social y Familia, Cristian Monckeberg se prepara una plataforma para postular a estos beneficios, una vez que se promulgue la ley.
Los sistemas de apoyo van referidos a créditos blandos, postergación de dividendos, ampliación de subsidios de arriendo y ampliación del crédito con aval del Estado (CAE) para los estudiantes de la educación superior.
El programa de Créditos Blandos Covid, está dirigido a trabajadores dependientes e independientes de clase media que no fueron beneficiados con anteriores medidas. Se trata de créditos que serán financiados y administrados por el estado con una tasa de interés del 0% y que tiene como objetivo cubrir el 70% de los ingresos perdidos por la pandemia por cuatro meses. Tendrá un tope máximo de 2.600.000.- pesos, los que serán divididos en cuatro cuotas de 650 mil pesos. Para pagar este crédito se tendrá tres años y un año de gracia.
La postergación de dividendos hipotecarios, también será con garantía del estado y está destinado para aquellas personas que están pagando su primera vivienda y producto de pandemia hayan visto mermados sus ingresos. Este beneficio busca que se puedan postergar hasta seis meses de dividendos para aquellas viviendas cuyo valor no supere las 10 mil UF, es decir los 286 millones de pesos. Otro dato importante es que no deben tener mora superior a 29 días.
La ampliación del subsidio para arriendo, está destinado a aquellas familias de ingresos medios y bajos que sus ingresos hayan disminuido al menos en un 30%. Este subsidio será por tres meses y considera un aporte de hasta 150 mil pesos par arriendos que asciendan hasta los 400 mil pesos.
Finalmente, la última medida va dirigida para los estudiantes que están cursando su educación superior. Se trata de la ampliación del crédito con aval del Estado (CAE), con una tasa preferencial del 2% y cuando se comience a pagar no superaría el 10% del sueldo ni se cobraría en caso de cesantía. El gobierno estima que cerca de 130 mil nuevos estudiantes podrán acceder a este beneficio.