Para los amantes de la naturaleza les damos una buena noticia y es que el Gobierno declaró como Santuario de la Naturaleza a la desembocadura del Río Loa, en un hecho que marca una importancia en la preservación de todo el ecosistema del delta y de su cauce que pasa a estar protegido por ley y que además contempla que sea fiscalizado y controlado por parte de las autoridades medio ambientales.
Por ello, a los inconscientes que se acostumbraron a ir a botar desechos al cauce del río, les contamos que ahora podrán ser multados o pagar hasta con penas de cárcel, ya que en una visita inspectiva al sector de la desembocadura informó la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, que “la creación de este nuevo santuario de la naturaleza, localizado en el río más extenso de nuestro país, busca proteger este verdadero oasis en medio del desierto que tiene una gran riqueza natural y belleza escénica que debemos conservar, y que se suma a las más de 231 mil hectáreas que hemos protegido con el Plan de Protección de Humedales”.
Cabe destacar que el santuario propuesto se emplaza en la parte más extrema del desierto, en un flujo permanente de descarga hacia el mar, constituyendo la única cuenca exorreica (que desemboca en el mar) desde el río Lluta por el norte (a 330 kilómetros) y el río Copiapó por el sur (a 650 kilómetros), en una extensión costera de casi mil kilómetros, en el borde del desierto más árido del mundo.
Por su parte, el superintendente de Medio Ambiente, Cristóbal De La Maza, comentó sobre este hito ambiental “que significa mucho para nuestro organismo, puesto que nos entrega y nos da las herramientas de control y fiscalización, lo que además asegura su protección y también a que la comunidad también se haga parte del cuidado de este santuario y toda su rica biodiversidad”.
Finalizó la autoridad que “esta nueva figura que protege la desembocadura del río Loa no sólo está limitada a su área del delta, también lo será el cauce del mismo río arriba. Con controles en sus cauces, que tengan la suficiente cantidad de agua que resguarde la desembocadura y toda la vida silvestre y natural asociada a todo su trayecto hasta que se encuentra con el mar. Por eso es tan importante que haya sido declarada santuario de la naturaleza”.