La vuelta a clases presenciales en el edificio nuevo de la escuela D-48 Presidente Balmaceda demuestra los cambios de la pandemia: las clases incorporaron cámaras, las cuales incluso usa el profesor de educación física en la nueva multicancha que cuenta con un marcador digital; los alumnos corren persiguiendo un balón, algunos se toman fotos, otros contemplan el lugar de cuatro pisos equipado con 20 salas de clases, laboratorios, sala de computación, casino y un ascensor. Espacio que después de 18 años volvió a tener la vida de un establecimiento educativo en la comuna de Calama.
En la escuela Presidente Balmaceda el 23 de octubre volvieron a la presencialidad, pero en el sector antiguo y solo los 1ros, 2dos y 8vos básicos. Luego de evaluar la situación, mediante encuestas y entrevistas con apoderados sumado al avance de la vacunación escolar, este martes 23 de noviembre se sumaron todos los niveles con 458 alumnos en clases de un total de 1.532 de ellos, debido a que los cursos fueron divididos y se desarrollan clases híbridas: la mitad ve la clase desde la casa. “Los que están en la casa, ¿me escuchan?”, dicen varios profesores implementando este sistema.
La directora (i) de la escuela, Gladys Gárate, comentó que “para los apoderados y para el cuerpo docente en realidad esto es un hito en la escuela. Esperamos 18 años para que se terminara la construcción y esto nos ha permitido también ingresar a jornada escolar completa. Eso significa que los alumnos tienen un horario de corrido y que van a aprovechar mayormente su tiempo en clases”.
De hecho, la implementación de la jornada completa fue la razón principal de la construcción de esta escuela que tardó 18 años, entre procesos frustrados y avances, hasta terminarse. “La escuela adquirió vida, los niños vinieron muy contentos, hoy se les hizo el recibimiento como corresponde. Y el compartir con sus compañeros ya es otra cosa para ellos. Entonces creo que eso les va facilitar incluso el aprendizaje”, dijo Gladys Gárate.
Y agregó que “en la mañana, cuando se hizo la bienvenida a los estudiantes, se les entregaron todas las recomendaciones que corresponden, sobre todo en el edificio nuevo porque es muy alto, hay algunas cosas en las que debemos ser prevenidos, porque los niños con el ímpetu de jugar, de correr, de ver algo nuevo también a veces pueden cometer errores. Entonces hemos insistido en que hay que tomar todas las precauciones de seguridad para que no tengamos accidentes”.
Reencuentros
En el sector antiguo de la escuela se llevan a cabo las clases de los alumnos de 1ro a 4to básico, Mientras que el edificio nuevo alberga los niveles de 5to a 8vo. Luisa Suarez, alumna de 7mo básico, nivel que cuenta con un 64% de jóvenes con su esquema de vacunación completo, comentó que tiene ambas dosis de la vacuna covid y que “la verdad se siente muy bien volver a ver a mis compañeros, ayudarnos entre nosotros, siempre y cuando estemos tomando las medidas de precaución y seguridad con el coronavirus”.
Sobre el recinto Luisa dijo que “la verdad es que me gustó la nueva escuela, está súper linda, los profesores son súper buena gente y aparte que mis compañeros son muy buenos conmigo y siempre, desde que llegué a pesar de ser extranjera, me acogieron acá”.
Samuel Hernández, alumno del 5to A, expresó que durante la época de cuarentenas le costó mucho adaptarse a ese sistema de aprendizaje online. Ahora aprecia una diferencia: “Puedo prestar más atención y me siento más cómodo con las tareas y me siento mejor comunicado”.
El alumno esta mañana ha tenido clases de Ciencias, Artes y ahora entrará con su curso a Tecnología, a quienes extraña mucho luego de casi dos años de verlos, exclusivamente, por internet.
Sobre el nuevo edificio de la escuela dijo que tenía conocimiento de que se demoró bastante en construirse y que “fue muy bueno, porque me gusta mucho, está limpio. No como en la otra escuela, donde en los baños no servían algunas cosas. Pero ahora todo está un poco más moderno, más bonito, está más organizado, tienen más basureros y eso”.