El fin de semana pasado, Carabineros realizó una nueva intervención en la Parcela 31, un local clausurado desde 2023, donde se llevaba a cabo una fiesta clandestina. Durante la operación, se decomisaron bebidas alcohólicas y varias personas fueron detenidas. Además, las autoridades han anunciado que tomarán acciones legales contra los propietarios del recinto, quienes han reincidido en la apertura del lugar, desafiando los sellos de clausura.
El comisario de la Primera Comisaría de Calama, teniente coronel Juan Pérez, explicó que la intervención se realizó tras recibir información sobre la realización de la fiesta ilegal. “Se procedió a la fiscalización, y como resultado hubo decomisos de bebidas alcohólicas y personas detenidas”, señaló Pérez.
Por su parte, el delegado presidencial provincial de El Loa, Miguel Ballesteros, informó que la Delegación Presidencial Provincial ha decidido presentar acciones judiciales contra los organizadores del evento y también contra los propietarios del recinto. “Los responsables han desafiado la autoridad abriendo nuevamente un local que ya está clausurado y están afectando la seguridad de la población. Esto generará una persecución penal”, indicó Ballesteros. El delegado agregó que se ha coordinado con el fiscal jefe para la persecución de los responsables, y que en los próximos días se presentarán recursos judiciales para avanzar con la investigación penal por la rotura de los sellos de clausura, delito que se está persiguiendo.
Además, Carabineros y las autoridades locales reiteraron un fuerte llamado a la comunidad para evitar participar en este tipo de eventos clandestinos. “No solo afecta legalmente a los organizadores y propietarios, sino también a los asistentes, quienes serán detenidos si se encuentran en un recinto clausurado”, advirtieron las autoridades.

En el mismo contexto, se destacó que el 33% de los homicidios registrados en Calama durante 2024 ocurrieron en fiestas clandestinas. Ballesteros subrayó que este tipo de eventos pone en riesgo la seguridad de los asistentes y, especialmente, de los menores de edad. “Exponerse a estas fiestas clandestinas pone en peligro la integridad física de los participantes”, comentó.
El delegado también recordó que la lucha contra las fiestas clandestinas continuará de manera rigurosa. Durante la semana pasada, se clausuró otro local establecido, el “Punta de Oro”, tras una riña violenta. “Vamos a seguir con el plan de tolerancia cero. No vamos a permitir que locales establecidos o clandestinos vulneren la normativa”, agregó.
Con respecto a la Parcela 31, las autoridades dejaron en claro que el local no volverá a abrir. Las sanciones para los responsables de la reapertura ilegal del recinto incluyen detenciones y acciones judiciales, que podrían derivar en prisión.
