Detalles escalofriantes se entregaron en la audiencia de formalización de cargos por el triple homicidio en San Pedro de Atacama de la familia Gavia- Butrón, que ayer fue despedida de forma emotiva por gran parte de la comunidad de la capital del turismo.
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Se conoció que el único imputado por este salvaje crimen identificado con las iniciales L.H.H de 35 años y nacionalidad ecuatoriana, vivía en el mismo domicilio de sus víctimas, el empresario Wilson Gavia (49), Juan Gavia (77) y Tomasa Butrón (74), (Q.E.P.D).
De acuerdo al relato del Ministerio Público, el día del crimen el imputado ató y amordazó a la familia, luego los torturó con golpes y heridas cortantes, con esto, consiguió 2 millones 700 mil pesos en efectivo, además de tarjetas de crédito y claves bancarias. Tras ello degolló a una de las víctimas, a otra la acuchilló hasta quitarle la vida y a la mujer de 74 años la ahogó con una bolsa.
Este verdadero asesino a sangre fría también confesó que tras matar a sus víctimas, salió a compartir con un amigo a una shopería, donde gastó mucho dinero e incluso invitó a las camareras y pagó con las tarjetas de crédito. Tras esto se trasladó a Calama, invitando a otro amigo con quien fue a un cabaret gastando cerca de un millón de pesos.
Todo esto fue confesado por el propio asesino y según narró la fiscal, habría reconocido entre llantos el triple homicidio cometido. Así, el tribunal dejó en prisión preventiva al sujeto y estableció el plazo de investigación en 200 días.