Fue en plena madrugada en la intersección de las Granaderos con Hernán Cortes que Carabineros detectó el primer grupo de ciudadanos venezolanos compuesto por 38 adultos, tres bebés y un niño de 12 años deambulando por el sector. Mientras que a las 5 am encontraron otro grupo compuesto por 5 personas más.
Según explicó el comandante de Carabineros, Robinson Villarroel los extranjeros fueron fiscalizados “constando que estas personas recientemente se habían bajado de un bus que había hecho un tramo desde Pozo Almonte hasta la ciudad de Calama”.
Tras ello “estas personas están en la unidad policial, están siendo resguardadas de igual manera los menores de edad recordando que ellos son lactantes. Se tomó contacto con el juez de Familia y ante esa situación se coordinó con la residencia sanitaria, para que una vez que terminen su formalización sean destinados a ese lugar”, explicó Villarroel.
Asimismo, agregó que a las 5 de la mañana nuevamente encontraron otro grupo de extranjeros, esta vez de cinco personas, las que se habían bajado de otro bus. En total son 47 extranjeros que se encuentran de forma ilegal e irregular en el país.
“Son personas que ya están en el país y lo que corresponde en este momento es solamente denunciarlas, el agravante de esto es que ellos se encontraban a las 3 de la mañana en la vía publica infringiendo el toque de queda por la norma sanitaria”, añadió el oficial de Carabineros.
Paralelo a ello se ofició al departamento de Extranjería de la Policía de Investigaciones, Gobernación y Fiscalía para que inicien los trámites pertinentes, además de una investigación para conocer cuál es el modus operandi que están utilizando para ingresar al país. En este sentido, los retenidos entregaron nombres de empresas y montos de dineros que les cobraron por este servicio.