El pasado sábado 21 inició la versión 25 del Festival Internacional de Teatro Zicosur, un evento que tiene su origen en la ciudad de Antofagasta, pero que como cada año, y en colaboración a la Ilustre Municipalidad de Calama y su Corporación Cultural, tiene también su extensión en la comuna de Calama, un tremendo panorama veraniego para disfrutar y que es gratuito para toda la comuna.
Es así, como el Teatro Municipal de Calama albergará cinco montajes a partir de este lunes 23, siendo el primero en presentarse “Pukará”, el montaje de las Escuelas de Formación Artísticas de la Corporación de Cultura y Turismo, quienes estuvieron presentes este en la inauguración del Festival en la Capital Regional. Esta obra, adaptación del libreto y música original de Ramón Ramos y Eduardo Zepeda respectivamente, narra la historia del pueblo Lickanantai, quienes viven prósperamente en sus tierras, sin imaginar que la invasión de un Imperio Inca está a las puertas de su reino. Esta obra es apta para todo público.
El martes 24 de enero en tanto, será el turno de “Ricardo Tercero de Shakespiare”, de Mondacca Teatro, quienes arriban desde la Paz, Bolivia. El montaje que también es apto para todo público, cuenta la historia de dos personas, que en plena pandemia, recrean las escenas más importantes de los clásicos de este artista.
Ya para el miércoles 25 de enero, está programada la presentación de “El Ritmo de la Noche”, del Colectivo de Artes Escénicas La Comuna, Santiago de Chile, montaje apta para mayores de 14 años, puesta en escena que en testimonios de personas que sobrevivieron a la dictadura militar chilena y que participaron de la noche gay entre fines de los 70’ y principios de los 90’, devela la particular naturaleza de aquellas noches donde lo festivo, la sexualidad y el fascismo configuran una intrincada trama en las calles de una ciudad que ya no existe.
El festival continuará el jueves 26 de enero con la presentación de “LP”, de Arnau Pérez, proveniente de Madrid, España. Un LP, del inglés Long Play, es un disco de vinilo de tamaño grande, en el cual se puede grabar un máximo de unos 20 a 25 minutos de sonido por cada cara. En este formato físicamente limitado, el artista atrapa todo un imaginario para ser transmitido a través de vibraciones y ondas dinámicas en el espacio, y así compartirlo con la audiencia.
Finaliza la programación de Calama el viernes 27 “Remolino de tierra”, de la Escuela de Teatro El Ojo, de la Corporación de Cultura y Turismo, un montaje que retrata la época de las salitreras, donde en los mismos pueblos, hombres, mujeres, niños, viven sus alegrías y
penas al alero de un campamento minero. Entra en la historia Rolando Machuca, oriundo de Talca, quien cuenta de cómo llego a trabajar al lugar, se enamoró y tuvo un hijo, pero con el tiempo todo cambió. Una enfermedad se llevó a su esposa y se quedó solo con su pequeño hijo.