Desesperada está la familia del ingeniero Héctor Henríquez, residente de San Pedro de Atacama, que desapareció el 29 de octubre del 2018 y solo fueron encontrados sus restos calcinados al interior de su vehículo en pleno desierto. A más de tres años de esto, la muerte de este profesional sigue siendo un enigma, pese a que existen pruebas que apuntarían a la intervención de terceras personas y sus cercanos exigen justicia.
“Estuvo desaparecido durante 6 meses, tiempo en el cual familia y amigos, buscamos sin respuesta, hasta que fue hallado en el desierto en medio de la nada, con su auto calcinado, al interior su cuerpo”, explicó a Chilevisión Noticias, Javier Henríquez, el hermano de este profesional.
Para dar contexto, el ingeniero vivía en San Pedro de Atacama, pero el día de su desaparición ocurrieron varias cosas, entre ellas que su expareja presentó una denuncia contra de el por Violencia Intrafamiliar. Una razón, porque la que se baraja un presunto suicidio.
“Nosotros desde el minuto tuvimos la certeza que mi hermano no había atentado contra su vida (…) una situación así (denuncia por VIF) conociendo la realidad de mi hermano, conociendo sus planes, no hubiese sido un gatillador para quitarse la vida. La sugerencia que plantean los informes es de que mi hermano estaba muerto antes de iniciase el fuego”, añadió Henríquez.
La familia de este ingeniero, sigue insistiendo que la investigación ha sido bastante irregular, ya que las pericias se hicieron tardíamente, hay diligencias que no se hicieron e informes que no se han tomado en cuenta, como dos informes en que se indicaría que el fuego empezó post muerte de Héctor. “Nosotros creemos que hubo intervención de terceros y no de la vereda de los sentimientos, sino de los elementos que ha arrojado la investigación, que sugiere que mi hermano ya estaba muerto antes que se prendiera el auto”, añadió el familiar de esta víctima.
La familia pide justicia, sobretodo porque en este momento, la madre del ingeniero está muy enferma y no quieren que le pase algo, sin antes saber finalmente que le hicieron a su hijo.
“No hubo investigación, monitoreo en las cámaras para saber lo que había pasado por lo menos dentro de la zona. No hubo levantamiento de los movimientos bancarios. Todo el proceso de pericias dentro del lugar, de la casa, del auto, fueron tardías, estamos hablando por lo menos un mes después. No tuvimos certeza de las llamadas de celular, en fin un sin número de acciones que definitivamente no las encontramos y las que logramos encontrar fueron pericias tardías”, remató Javier Henríquez.
A más de tres años de la muerte de Héctor Henríquez, la familia solo espera que su muerte sea aclarada, ya que no los deja descansar esta incertidumbre, sobretodo cada vez que deben sacar un papel de defunción y en las causas, sigue saliendo, indeterminado.