La remediación de suelos contaminados por seis antiguos “relaves de minerales”, que permanecen abandonados, es una prioridad para Taltal, ante la carencia de terrenos para la necesaria expansión de esta creciente comuna y el impacto de la contaminación en la salud de las personas.
El dilema de los relaves fue expuesto por el alcalde de Taltal, Guillermo Hidalgo, en la reunión de directorio de la Asociación de Municipalidades del Norte de Chile, AMUNOCHI, que se desarrolló en Alto Hospicio. Hidalgo, en ese contexto, afirmó que ha estado solicitando al Gobierno Regional de Antofagasta, un proyecto para la remediación de los suelos contaminados y así dar una solución definitiva a este problema que viene arrastrándose hace años. “Queremos entregar a la comunidad una respuesta. Proyectamos de que una vez remediados los suelos, los espacios sean habitables para los taltalinos y taltalinas. Esos terrenos, que están contaminados hace décadas, no nos permiten avanzar en la búsqueda de soluciones”, aseveró el alcalde.
De esta manera, el directorio de AMUNOCHI acordó apoyar la gestión que realiza el jefe comunal de Taltal, tendiente a que el Gobierno Regional de Antofagasta, continúe cabalmente el abordaje de esta situación, de manera que se tomen medidas para mitigar el efecto en la salud de la población.
Informe
Un informe -basado en estudios anteriores desde 2014- del Centro Científico Tecnológico para la Minería, CICITEM, denominado Relaves Abandonados y fechado el 14 de julio de 2023, determinó los lugares afectados en el borde costero de Taltal. De esta manera se detallaron los relaves en los sectores: playa Tierra del Moro; Trapiche Taltal; Planta Lado ENAMI: Trapiche Carlos Martínez; Sotramin y Playa Atacama; y Trapiche Cabezal Sur.
En cuanto a los riesgos para la salud, el informe determinó que los sectores más complicados son Trapiche Taltal con riesgo cancerígeno por ingestión o contacto dérmico, con contaminantes. Misma situación la Planta Lado ENAMI, Trapiche Carlos Martínez, Sotramin y Playa Atacama y finalmente el Trapiche Cabeza Sur.
Dado este contexto, Guillermo Hidalgo, dijo que Taltal puede considerarse como una “zona de sacrificio”. “Aquí históricamente no existió una normativa ambiental que impidiera la instalación de estos tratamientos de minerales en el borde costero ni tampoco una solución a estos que se arrastran hace muchos años”.