Desde este miércoles y hasta el próximo sábado 28 de mayo, la Plaza 23 de Marzo albergará la Expo Patrimonial Rural, una iniciativa de la Ilustre Municipalidad de Calama y su Corporación de Cultura y Turismo, que, enmarcada dentro del programa del Mes del Patrimonio, otorga este significativo espacio para la promoción y difusión del trabajo que artesanos y agricultores de la zona realizan día a día.
Y es que ha sido precisamente ese el objetivo en cada iniciativa, el resaltar y destacar, primeramente, en este caso, a los más grandes tesoros del territorio, como son los exponentes de estos espacios.
Desde trabajos en cobre, lanas y vellón, y hasta deliciosas preparaciones propias del Alto Loa, se estarán comercializando en la Plaza de 10:00 a 18:30 horas, un espacio que de acuerdo a lo informado por Edwin Alavia Ticona, Director Ejecutivo de la Corporación de Cultura y Turismo, tiene especial sentido dado el valor que se le otorga principalmente a sus exponentes. “Se destacada el trabajo artesanal, de agricultores de la zona, del Alto Loa, que siempre han participado con nosotros, entonces qué mejor que hacerlo de esta forma”.
Reconocimiento a Elena Tito
La jornada inaugural de esta Exposición, tuvo un espacio especial para realizar un homenaje póstumo a Elena Tito Tito, destacada artesana alfarera fallecida el pasado 14 de abril. Tito, quien recibió la Mención como Tesoro Humano Vivo en 2015 – que otorga el Ministerio de las Artes, las Culturas y el Patrimonio, tuvo una importante y permanente conexión con cada una de las iniciativas de este corte de la Corporación Municipal.
Era habitual verla en cada versión de la Feria de la Biodiversidad, en la Feploa, o en otras iniciativas enseñando la técnica de la alfarería a grandes y chicos, incluso, en el mes de marzo, fue destacada por el mismo equipo de la entidad cultural en la intervención Héroes Urbanos. Es por ello, que, en el inicio de esta exposición, se le recordó y homenajeó, en presencia de su familia.
Mónica Coria Tito, hija de Elena, agradeció este reconocimiento, destacando además que, desde antes de su fallecimiento, Tito siempre tuvo un lugar especial y de reconocimiento que fue otorgado por Municipio y Corporación Cultural. “Ella siempre fue partícipe de estas actividades con su alfarería atacameña (…) y nosotros estamos muy agradecidos al Municipio y Corporación, porque siempre se le hicieron reconocimientos en vida, y eso lo agradecemos. Nosotros como familia nos sentimos viviendo un duelo con tantas personas, y es increíble. Ella fue un ser que se dejó querer y se hacía querer, y siempre proporcionó su conocimiento”.
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