El huevo, durante este año 2023, ha subido de precio en un 27.5%. Si se analiza el alza durante los últimos 12 meses, este valor se eleva hasta el 41%. Por esta razón es que los contrabandistas, han apuntado a internar al país este producto desde Bolivia. Lo rentable de su distribución ante los precios del huevo nacional, es razón fundamental.
Según un informe dado a conocer por el SAG, y replicado por LUN, la internación ilegal de huevos, ha crecido 136% respecto a la misma fecha del año anterior. En cifras, las autoridades han requisado 224.000 unidades de huevo. Este producto, según cuentan los contrabandistas sorprendidos mientras transportaban la carga, proviene de las chacras y los campos de Bolivia.
A modo comparativo, una bandeja de huevos nacional de 20 unidades, sale aproximadamente 5.500 pesos. La misma cantidad de huevo boliviano, cuesta menos de la mitad: se vende por 2.500 pesos.
Tal es la rentabilidad de este negocio de contrabando, que los traficantes hacen hasta dos viajes a la semana desde Bolivia hasta Iquique o Alto Hospicio. Desde esas ciudades, se distribuye al resto del país. La ruta predilecta, es a través del paso fronterizo Colchane. El transporte de los huevos se realiza en furgonetas tipo Delica, de Mitsubishi, a las cuales les sacan los asientos traseros.
El incremento del precio del huevo nacional, se debe a la llegada de la Influenza Aviar. Esta gripe, que afecta a las aves, ha sido detectada en corrales de empresas productoras de huevo. Esto provoca que se pierda la producción de huevo, dado el riesgo de contagio hacia un humano (lo cual es casi improbable), además que lleva al sacrificio de todas las aves con sospecha de contagio.
A pesar de sus ventajas en cuanto a costos, el consumo de huevo de contrabando supone un riesgo para la salud, dado el desconocimiento de las condiciones sanitarias de producción, así como de transporte y conservación.
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