El cardenal estadounidense Robert Prevost fue elegido como el nuevo Papa de la Iglesia Católica, adoptando el nombre de León XIV y convirtiéndose en el Pontífice número 267 en la historia. La elección tuvo lugar en el segundo día del Cónclave, durante la cuarta votación entre los 133 cardenales electores, donde Prevost alcanzó los 89 votos necesarios para ser proclamado Sumo Pontífice.
Prevost, quien también posee la nacionalidad peruana desde 2015, ha desarrollado una parte significativa de su vida religiosa en Perú. Llegó por primera vez al país en 1985 como misionero agustino, tres años después de su ordenación sacerdotal. En 1988 regresó para dirigir durante diez años el seminario agustiniano de Trujillo, en el norte peruano. Más adelante, en 2014, fue designado administrador apostólico de la Diócesis de Chiclayo, y luego nombrado obispo de esa misma jurisdicción.
Entre 2018 y 2023, Robert Prevost también integró la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), donde ocupó el cargo de vicepresidente segundo. Además, entre 2020 y 2021, fue designado administrador apostólico del Callao, la provincia portuaria ubicada junto a Lima. Además, Robert Prevost se desempeña como presidente de la Pontificia Comisión para América Latina y, desde 2023, fue convocado a Roma por el papa Francisco —con quien mantenía una estrecha relación— para asumir la dirección del Dicasterio para los Obispos, uno de los organismos más importantes de la Curia Vaticana.
El momento de su elección fue anunciado al mundo a las 12:07 horas en Chile (18:07 en Roma), cuando el humo blanco emergió desde la Capilla Sixtina, acompañado por las campanas del Vaticano. La señal fue recibida con júbilo por miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro y por millones que seguían la transmisión en todo el mundo.
Cerca de una hora después, desde el balcón de la Basílica de San Pedro, el cardenal protodiácono Dominique Mamberti dio a conocer el tradicional “Habemus Papam”, revelando el nombre del nuevo líder espiritual de más de mil millones de católicos.
