Incertidumbre existe frente al inicio de la operación del nuevo rodoviario de la ciudad de Calama, puesto que luego de más de 10 años aún no se autoriza la apertura y funcionamiento del mismo. La empresa alude a los diversos cambios que han tenido que hacer a los accesos de sus instalaciones, en tanto Bienes Nacionales solicitó ya el fin de la concesión por la extensa demora del proyecto.
El director de Desarrollo de P y R Inversiones, Felipe Banda, empresa que desarrolla el proyecto de nuevo rodoviario de Calama, explicó que “el terminal tiene recepción final desde el 27 de junio de 2023 y desde esa época está listo para operar, incluso hemos hecho servicios, pero no hemos logrado destrabar la aprobación de las vías de acceso, por todas las modificaciones viales…vale decir, todo el entorno vial del terminal ha sido modificado dramáticamente y eso tiene dos consecuencias: una muy buena, en el sentido que el terminal va a tener una excelente condición de conectividad con el resto de la ciudad; y un efecto negativo, porque este mismo proceso nos ha hecho cambiar los proyectos de acceso y ajustarnos a esta nueva condición y ese es el problema que se ha generado y que ha extendido bastante más el proceso de aprobación”.
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En tanto la Seremi de Bienes Nacionales, Angelique Araya ya ofició al nivel central para poner fin a la concesión del terreno, “esto lleva cerca de 10 años y lamento decir que no tenemos muchas novedades porque la empresa en cuestión, no ha dado cumplimiento al proyecto. En realidad, ellos están en grave falta con Bienes Nacionales, tanto así, que nosotros enviamos un oficio a nuestro nivel central pidiendo incluso el término de este contrato por grave incumplimiento”.
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