La municipalidad de Calama, informó que demolerá las casas abandonadas ubicadas en la población Oasis Norte. Estas casas, que son 23, están con daño estructural, por lo que no pueden ser utilizadas, por riesgo de derrumbe. Ubicadas en los pasajes Colchagua y Río Salado, están sin habitantes desde 2021. Debido a ello, se han convertido en un foco de delincuencia, según denuncian vecinos.
Yasna Barrera, dueña de una de las casas abandonadas en la población Oasis Norte, comentó que, desde el año en que debieron abandonar sus casas, han vivido gracias a un subsidio de arriendo que les entrega el Serviu, a la espera de alguna solución habitacional.
“En este año, nos han dicho que nos van a entregar casas debajo de la Rene Schneider, donde se están construyendo unas casas actualmente. A nosotros nos toca la segunda etapa, que todavía no la construyen. Ya tenemos nombre de las casas que nos van a tocar. Tenemos que esperar que empecen a construirlas”. Complementó Barrera.
Las casas afectadas por daño estructural en la población Oasis Norte, fueron entregadas a sus dueños originales, en el año 2004. Un año después, en 2005, hubo un derrumbe de dos casas, cuestión que puso la alerta entre los vecinos, siendo el origen del problema. La situación se repitió dos años después, cuando se iniciaron los primeros desalojos. Respecto a las causas de la falla estructural, Barrera lo tiene claro. “La tierra estaba mal compactada. Esa era una quebrada. Lo único que hicieron, fue construir encima y no hicieron bien el trabajo de la tierra”.
Sobre la ocupación de casas Yasna Barrera dice que esto es efectivo. “La presidenta de (la junta de vecinos) de la población Oasis, ha tenido muchos problemas con esas casas. Los de la calle, empezaron a robarse todo: sacaron las calaminas, se empezaron a meter a las casas, hacían fuego. Los bomberos van siempre a apagar los fuegos, porque al lado de las casas de nosotros, todavía vive gente. Ha tenido mucho problema”.