En el concejo municipal del pasado 28 de enero, el concejal y candidato a alcalde de Calama, Jorge Olivares, planteó la preocupación respecto a la gran cantidad de extranjeros que están ingresando de manera ilegal a la región y en particular a la ciudad, pronunciamiento que cobra relevancia considerando la situación de Colchane –en la región de Tarapacá- y el fallecimiento de dos personas en esta condición.
“La situación es muy compleja, porque no podemos permitir camiones cargando personas, grupos caminando por pleno desierto y en todos los casos con niños, muchas veces lactantes. Es imperioso que se asuman las medidas necesarias para controlar la migración y así evitar muertes y vulneraciones a leyes de nuestro país que van desde la regulación de ingreso, las restricciones de la pandemia hasta la protección de los más pequeños”, expresó el edil.
Agregó que si bien en concejo quedó de manifiesto que existe una mesa de trabajo entre los alcaldes de la región y el gobierno, “es fundamental que sea resolutiva y no una mera respuesta políticamente correcta. Porque en Calama tenemos personas entrando por pasos no habilitados, que están viviendo en la calle y no podemos esperar a que se registre un hecho de violencia o una muerte para recién actuar de manera concreta”.
Leyes
En este contexto, Olivares planteó que el no ser diligentes contraviene precisamente lo que el mismo gobierno adoptó al asumir el decreto 102 –que dispone el cierre temporal de lugares habilitados para el ingreso de extranjeros, por emergencia de salud pública de importancia internacional por brote del nuevo coronavirus.
“Si bien estamos hablando del cierre de nuestros pasos habilitados y la medida está vigente, también hay que ser conscientes de la extensión de terreno que queda desprotegido y que debiera ser motivo también de resguardo y control, pues el mismo decreto expresa que ‘según la Constitución Política de la República, es deber del Estado dar protección a la población y le corresponde la coordinación y control de las acciones relacionadas con la salud de la población”, argumentó Olivares.
En tanto, explicó que no está en desacuerdo con la migración, “mientras sea responsable, clara y que garantice los derechos de nacionales como extranjeros y debe ser una política conocida, para que cuando tomen la decisión de venir a Chile sepan que existen medidas, que no se puede mirar un tutorial en redes sociales y vulnerar el sistema”.
“Es lamentable ver cómo están viviendo en Calama, con cero medidas sanitarias, exponiendo a sus hijos y sin ninguna garantía, como también la condición en la que está nuestro país, en la que tras la pandemia las familias quedaron sin trabajo, los contagios están en aumento y a pesar que comenzó la campaña de vacunación, el futuro sigue siendo más bien incierto. No es justo ni digno para nadie que esto esté ocurriendo y no se asuman las medidas pertinentes de forma rápida”, puntualizó Jorge Olivares.