San Pedro de Atacama, conocido por sus cielos despejados y su rica herencia cultural, ha dado un paso significativo hacia la preservación y promoción de sus raíces ancestrales con la inauguración del primer Centro Astronómico Ecológico iocrux. Ubicado en el ayllu de Poconche, este proyecto busca fusionar la observación astronómica con la conservación cultural y ambiental, en un entorno que se ha mantenido intacto desde tiempos prehispánicos.
David Barrera, psicólogo y propietario del Lodge Terrantai, expresó su emoción al ver cómo este nuevo observatorio honra la memoria de los antiguos habitantes de la región. “Para nosotros es memoria antigua y esta nos evoca los cielos y los paisajes que nuestros ancestros también observaron”, afirmó Barrera, quien comenzó su carrera como guía en 1988 y ha trabajado incansablemente para preservar las tradiciones locales.
El centro astronómico no solo ofrece una experiencia única de observación, sino que también incorpora elementos arquitectónicos y técnicas tradicionales. “Este Cosmos maravilloso nos conecta con los abuelos”, comentó un consejero atacameño, subrayando la importancia del proyecto como un vínculo entre las generaciones actuales y sus ancestros.
Jenny Véliz, socia del centro, explicó que el proyecto se sustenta en tres pilares fundamentales: cultura, arte y ciencia. “Hemos desarrollado este observatorio con un enfoque en la sostenibilidad”, señaló Véliz, destacando que el centro es autosuficiente en términos de energía y recursos, utilizando energía fotovoltaica y sistemas de purificación de agua.
Finalmente, Mauricio Soriano, director regional de Sernatur, destacó la importancia de integrar la sostenibilidad en todas las iniciativas turísticas. “Queremos que el destino se siga proyectando hacia el futuro para las nuevas generaciones”, comentó, subrayando que el proyecto es un ejemplo de cómo la cultura y el turismo pueden ir de la mano para promover un desarrollo sostenible y respetuoso con el medio ambiente.