Este sábado se llevó a cabo en Calama los servicios religiosos de las iglesias Católica y Evangélica, al conmemorarse un nuevo aniversario de Chile.
Durante la mañana y en la Catedral San Juan Bautista, se llevó a cabo el Te Deum en donde el, recientemente asumido obispo de Calama, monseñor Tomás Carrasco hizo un llamado a la propiciar los valores de la paz, unidad y la caridad.
“Mi primeras palabras fueron justamente para que nos animemos a construir la paz”, manifestó monseñor Carrasco, quien además agregó que su segundo mensaje fue sobre la unidad, aquella “que no es uniformar solo criterios para que todos sean clonados, es la unidad que se construye a partir tambien de reconocerse que tenemos diferencias pero las diferencias tienen que unirnos y tiene que hacernos más fuerte para trabajar por el fin último que es la gente”.
Finalmente, con respecto a la caridad, el pastor de la iglesia Católica añadió que “la frase “ama a tu prójimo como a ti mismo” es muy solidaria, es de donde parte la donación de nosotros para descubrir a aquel que hoy en día está más marginado, el que está triste, el que está solo, el abandonado, el que quizás muchas veces no tiene voz, cómo darnos cuenta entre todos, partiendo de la unidad, de aquel que necesita la solidaridad”.
En tanto, en la tarde en la Iglesia El Santuario ubicada en el sector poniente de la ciudad, se llevó a cabo el Culto de Acción de Gracias, en donde el mensaje estuvo centrado en vivir una vida como Dios quiere que su pueblo lo haga, explicando la frase “Venga tu Reino” y exponiendo Mateo 4:17 “Arrepentíos porque el Reino de los Cielos está Aquí”.
La Palabra fue entregada por la pastora, Soledad Islas, quien destacó que al arrepentirnos hay un cambio de conducta que desecha lo malo, y que al orar en “venga tu Reino” aceptamos a que Dios gobierne nuestras vidas y corazones, entonces se produce un cambio de mentalidad en donde la corrupción, delitos, malas conductas, robos, entre otros, no entra en el Reino de los Cielos, que no es un lugar geográfico, sino un dominio espiritual.
De esta forma, las iglesias Católica y Evangélica se unieron a las celebraciones de un nuevo aniversario de la independencia de Chile, orando por el país y sus autoridades.