Este lunes 1 de julio de 2024 marca un hito significativo en la economía chilena: el salario mínimo sube a $500 mil pesos. Esta medida responde a una promesa de campaña del presidente Gabriel Boric, quien ha buscado mejorar las condiciones laborales y económicas de los trabajadores en el país. El aumento del salario mínimo es parte de una serie de políticas enfocadas en lograr un ingreso más justo y digno para todos los chilenos.
El incremento del sueldo mínimo en Chile representa un alza de $40 mil pesos en comparación con el salario anterior, que era de $460 mil hasta el 30 de junio de 2024. Este ajuste es el último de una serie de aumentos graduales que comenzaron en mayo de 2023, cuando el sueldo mínimo pasó de $410 mil a $440 mil, y luego a $460 mil en septiembre del mismo año. Estos incrementos han sido resultado de negociaciones entre el Gobierno y la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).
La CUT y el Ejecutivo ya están en conversaciones para futuros ajustes del salario mínimo. Según informaciones preliminares, la gremial aspira a que el salario básico alcance los $630 mil al final del mandato de Gabriel Boric en marzo de 2026. Este incremento proyectado equivaldría a un aumento del 26% respecto a los $500 mil actuales, lo que reflejaría un compromiso continuo con la mejora de los ingresos laborales.
En cuanto a la distribución de ingresos, un estudio de la Fundación SOL basado en la encuesta Casen 2022 revela que la mitad de los trabajadores en Chile gana menos de $500 mil líquidos mensuales. Aunque el ingreso laboral promedio mensual de las personas ocupadas fue de $729.301 líquidos, la mediana de ingresos es de $500 mil líquidos, lo que indica una significativa desigualdad en la distribución de ingresos en el país.
Gonzalo Durán, investigador de la Fundación SOL, destaca que la mediana de ingresos en Chile equivale a solo dos tercios del ingreso promedio, subrayando los altos niveles de desigualdad existentes. La Encuesta Suplementaria de Ingresos (ESI) 2022 refuerza esta perspectiva, mostrando que el tramo de ingresos de $400 mil a $500 mil concentra al 17,3% de las personas ocupadas, mientras que los tramos de $300 mil a $400 mil y de $500 mil representan el 12,5% y el 11,1%, respectivamente.
Este aumento del salario mínimo busca no solo mejorar la capacidad adquisitiva de los trabajadores, sino también reducir la brecha de desigualdad en Chile. Sin embargo, sigue siendo un desafío significativo lograr un equilibrio justo y equitativo en la distribución de ingresos, y será crucial observar cómo evolucionan las negociaciones y las políticas salariales en los próximos años.