Redacción
La familia de Ariana Araya, una madre de 41 años, presentó una denuncia por negligencia médica tras su fallecimiento el 1 de octubre en el Hospital de Calama. Ariana fue sometida a una cirugía ambulatoria en septiembre para extirpar un quiste, pero la operación derivó en complicaciones graves cuando se le lesionó el colon, causando una infección interna. A pesar de ser readmitida en el hospital, su estado de salud se deterioró y murió debido a un paro cardiorrespiratorio.
El hospital toma medidas para investigar y mejorar sus procesos
Según su prima Constanza Araya, “a Ariana se le programó una operación para extirpar un quiste de 6 centímetros, pero durante la cirugía no lograron localizarlo. Posteriormente, le dieron el alta, pero empezó a tener fiebre y dolores severos, lo que nos llevó a regresar al hospital, donde finalmente fue internada”. Ariana fue inducida a coma, y su familia acusa que la atención recibida durante su hospitalización fue deficiente, además de denunciar maltratos por parte del personal de enfermería.
En respuesta a las denuncias, el Hospital de Calama emitió un comunicado lamentando profundamente lo ocurrido y extendiendo sus condolencias a la familia de Ariana Araya. El hospital anunció la instrucción de una Auditoría Médica para investigar los hechos y está evaluando realizar un Sumario Administrativo para determinar posibles responsabilidades. “Queremos apoyar a la familia en todo lo que sea necesario para poder esclarecer los hechos denunciados”, se lee en el comunicado.
El hospital también señaló que está en constante evaluación de sus procesos para garantizar una mejor atención a sus pacientes y evitar que situaciones como esta vuelvan a ocurrir. Con estas medidas, el Hospital de Calama busca fortalecer sus protocolos de atención y asegurar que los pacientes reciban la calidad de servicio que merecen.
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