Durante la sesión del Concejo Municipal de Calama de este lunes, se resolvió reemplazar el régimen de usufructo por un comodato en la administración del Estadio Techado, actualmente en manos del Consejo Local del Deporte (Colodep). La decisión fue adoptada tras un informe emitido por el Departamento Jurídico de la Municipalidad, el cual concluyó que no se cumplen los requisitos legales para renovar el usufructo vencido en marzo.
Liseth Marchant, representante del Departamento Jurídico, detalló que el cambio de régimen responde a una serie de antecedentes que cuestionan la legalidad del usufructo. Entre ellos, se identificó la existencia de una patente comercial en dependencias municipales —actualmente caducada— y denuncias por presuntas irregularidades económicas, como el arriendo de una oficina a una empresa por $600.000 mensuales, cuyos pagos fueron cobrados por terceros no vinculados formalmente a Colodep.
“El usufructo implica ceder no solo el uso, sino también el goce del bien, permitiendo incluso generar ingresos. En este caso, no se ha acreditado la utilidad manifiesta que exige el artículo 34 de la Ley Orgánica de Municipalidades”, explicó Marchant. Agregó que Colodep justificó su solicitud argumentando la necesidad del usufructo para postular a proyectos de mejora del recinto; sin embargo, tras consultar diversos fondos concursables públicos y privados, la asesoría jurídica comprobó que ninguno exige esa figura legal para acceder a financiamiento, siendo suficiente un comodato.
El usufructo es una figura legal que permite a una organización usar y beneficiarse económicamente de un bien municipal, como arrendar espacios o generar ingresos. A diferencia del comodato, que solo otorga uso, el usufructo implica también el goce del bien. Su otorgamiento requiere justificar una “utilidad manifiesta”, es decir, que el traspaso sea indispensable para el interés público, según lo establece la Ley Orgánica de Municipalidades.
El concejal Inti Alavia, presidente de la Comisión de Deporte, respaldó la recomendación jurídica señalando que “hoy no existen las garantías legales para renovar el usufructo”, y que el nuevo comodato —vigente hasta el 31 de diciembre— permitirá fiscalizar el destino de los recursos entregados por el municipio.
Con respecto a la deuda que mantenía el Colodep con la empresa contratista que lleva a cabo los arreglos del Estadio Techado, el concejal Alavia precisó que le presentaron los respaldos financieros requeridos, lo que permitirá retomar los trabajos pendientes en el recinto deportivo, cuya ejecución presenta un 98% de avance, de acuerdo con lo informado por la propia firma.
Además, Alavia recalcó que los hechos expuestos —como el arriendo interno a particulares y la falta de claridad sobre el uso de fondos— deben ser regularizados. Es así que, la Dirección de Control del Municipio “recomendó normar cómo se arriendan los espacios, quién cobra y cómo se documenta. Esto es indispensable para seguir colaborando con transparencia en proyectos deportivos”, finalizó.
