En una decisión histórica, los ocho concejales de Calama, junto al alcalde Eliecer Chamorro, aprobaron de manera unánime retirar la calidad de “reservado” de las sesiones en las que se abordan temas relacionados con las patentes de alcohol. Este cambio permitirá que cualquier persona pueda presenciar estas discusiones y, además, que las sesiones sean transmitidas de manera online, marcando un hito en transparencia municipal.
Esta decisión representa un cambio importante, ya que la calidad de “reservado” tenía sus raíces en antecedentes históricos que afectaron a los concejales y funcionarios municipales. Según recordaron en el mismo concejo señalando que, “los alcaldes anteriores también lo tenían reservado porque, en una ocasión, cuando se rechazaron varias patentes, los trabajadores afectados protestaron afuera del municipio, generando amedrentamientos hacia los concejales”. Estos hechos ocurrieron durante el periodo del exalcalde Arturo Molina, cuando varios ediles fueron amenazados tras decisiones que afectaban al rubro del alcohol.
El alcalde Chamorro destacó la importancia del consenso alcanzado, señalando que esta medida refuerza la transparencia de los procesos municipales. “Esto hace importante porque así se van conociendo las razones y las justificaciones que tiene cada concejal para resolver una patente de alcohol”, afirmó, añadiendo que el proceso seguirá contando con la participación de juntas de vecinos y el apoyo de autoridades como Carabineros y la delegación local para garantizar la efectividad en la toma de decisiones.
Por su parte, el concejal Martín Tapia, del Partido Republicano, valoró el cambio como un paso hacia una mayor transparencia, aunque reconoció los riesgos históricos asociados a estos debates. “Históricamente, las sesiones eran reservadas por casos de amedrentamientos hacia exconcejales y funcionarios municipales. Sin embargo, hemos adoptado una postura en honor a la transparencia de las actuaciones del municipio”, indicó Tapia, quien enfatizó que el concejo nunca ha actuado en favor o perjuicio de intereses particulares.
El concejal Tapia también subrayó el impacto económico del rubro de alcohol en una zona minera como Calama, calificándolo como un negocio multimillonario que, en ocasiones, genera tensiones con las decisiones municipales. “Cuando denegamos una patente lo hacemos basándonos en antecedentes claros y con el apoyo de un equipo técnico. Nuestra prioridad es la transparencia y el cumplimiento de las normativas”, agregó.
Este avance representa un cambio significativo en la administración local y un compromiso claro con la rendición de cuentas y la confianza pública, fortaleciendo la relación entre el municipio y los ciudadanos de Calama.